hh:hh, DD/MM/19

Estuve caminando por las calles de mis memorias mientras intentaba hacer las pases con el sueño,

y entre esas caminatas contemple las sensaciones que había olvidado que podía vivir:

En el ejercicio de lograr dormir, en esos cortos o largos minutos hay un sinfín de posibilidades... 

Es como si tu piel se desprendiera y tu alma fuera descociéndose poco a poco... caminas por la casa, vas a lugares que no recordabas conocer, viajas a la luna y te escondes en un cráter, luego aterrizas en un jardín de margaritas y te cuelas en un soplo de diente de león... 

. . . 

En realidad seguía allí, bajo la cobija buscando la oscuridad en una tarde demasiado soleada, buscando paz, buscando llenar de vacío mi llenura de la pesada nada... Seguía allí con las sensaciones de la cobija sobre mi piel, de mis pies frotándose uno a otro, del sonido de la fricción de mi cabello con la almohada... y este momento es tan efímero como un rojizo y precioso atardecer, si no lo aprecias, desaparecerá y jamás volverá a existir uno igual...