Carta desesperada.

Cuentame por favor, 

hazme saber cuando le conozcas los lunares,

dime a detalle que tan intenso es el brillo de sus ojos,

y si te pesaron sus piernas...

confírmame que su cabello baila, 

y que lo mas probable es que se hayan interesado por lo mismo,

dime que no te cabe en las manos, 

rompeme el alma, 

dime por favor,

hazmelo saber, 

para tambien odiarte, 

para sentir el mismo desprecio que tu

necesito una razón mas grande que el casancio, 

necesito una causa que me supere para poder 

aceptar alfin que todo lo que extraño ya no existe

para entender de una buena vez que solo existimos y ya no existiremos nunca mas.